Las obras de Bianca Monroy son una explosión a los sentidos; en medio de este mundo caótico y revolucionado, y a pesar de haberse enfrentado a episodios muy dolorosos en su vida, la artista ha decidido potenciar la belleza intrínseca del ser, siendo sus obras una explosión de color, positivismo y alegría; cualidades que se reflejan en la personalidad de la artista, en sus relaciones interpersonales y en su actitud ante la vida.