En este libro de ideas vamos a mostrarles las múltiples posibilidades decorativas que tiene el concreto.
Los materiales de construcción varían en cuanto a su versatilidad y a los diferentes acabados que nos pueden ofrecer. El concreto es uno de esos materiales que quienes no están versados en la materia pueden pensar que no ofrece demasiadas opciones. Nada más alejado de la verdad, como pueden dar fe muchos de nuestros profesionales. El concreto nos ofrece una variedad de texturas que pueden darle a nuestras superficies acabados realmente novedosos, haciéndolas mucho más táctiles y dándoles diferentes dimensiones. Sin contar las diferentes mezclas e incluso los colores que podemos elegir, cuando hablamos de concreto, con frecuencia bastarán las distintas técnicas para su aplicación.
Pero ¿qué es el concreto? Es una mezcla de cemento, que es un aglomerante con agua, arena, grava o gravilla, estos últimos constituyen los llamados áridos
. Esta mezcla líquida se fragua y endurece en pocas horas y tiene propiedades adherentes.
Lo que le da al concreto su versatilidad, son los diferentes aditivos que se añaden a esta mezcla, que pueden cambiar desde su color, hasta su aspecto una vez que haya secado. Por otro lado, existen técnicas como el encofrado, que consiste en vertir la mezcla en receptáculos de madera que imprimen la textura de los tablones en el concreto a medida que seca, dándole esa apariencia estriada.
Hoy nos referiremos más que al concreto usado en construcción, al concreto a la vista, utilizado sobre todo en interiores y los diferentes acabados por los que podemos decantarnos en el momento decorar o diseñar un espacio.
Acompáñennos a conocer estos 18 espacios y las variedades de concreto que los acompañan, que, de seguro les servirán de inspiración a los fanáticos de este material.
El concreto a la vista utilizado en paredes, topes o pisos es un legado del estilo moderno, del siglo pasado, ya que fue durante este movimiento arquitectónico cuando este material, junto con el acero y el vidrio, comenzaron a ganar terreno. Dependiendo de la superficie, la mezcla del concreto deberá variar, para evitar grietas y rayones.
Es una técnica mediante la cual se lava
con ácido la capa superior del concreto exponiendo así la arena y otros áridos como grava o gravilla. Esto le da un color y una textura más heterogénea que resulta muy interesante en cualquier superficie. Esta técnica se ha puesto muy de moda últimamente y ahora que ya la conocemos, de seguro empezaremos a notarla con frecuencia en diferentes lugares.
Lo que permite esta técnica del concreto lavado es poder sentir de qué esta hecha la mezcla cuando pasamos la mano sobre la superficie. No se trata nada más de la parte visual, sino también del aspecto táctil, que nos permite conectar con esas partículas de arena y piedra que forman parte de la mezcla.
La técnica del cepillado consiste en dejar que el concreto fragüe y cuando empieza a aparecer esa capa lustrosa comenzar a cepillar la superficie con un cepillo de cerdas suaves. Podemos hacerlo en una sola dirección para un acabado más uniforme o si queremos que el acabado sea más rústico y áspero, hacerlo de manera circular y en muchas direcciones. La idea de esta técnica, es darle una textura más profunda y marcada al concreto.
Para el concreto pulido se utiliza una mezcla de cemento muy flexible, que nos permitirá darle ese acabado brillante y liso. No es recomendable hacerlo con cualquier mezcla, ya que puede tender a resquebrajarse. Para proteger el concreto y darle un acabado más parejo, vale la pena plastificarlo.
Para darle un acabado escobillado, que es más sutil que el cepillado, usaremos un escobillón de cerdas suaves y lo pasaremos por la mezcla ya fraguada, pero no completamente seca.
El concreto a la vista en exteriores es un material que se beneficia de su exposición a los elementos, ya que se va suavizando su color y su textura, dándole un aspecto gastado que resulta muy atractivo.
En muros, el concreto lavado puede ser aún más táctil que en pisos, ya que podemos darnos el lujo de que esta superficie sea un poco más irregular, puesto que no caminaremos sobre ella y no tendremos el riesgo de tropezar.
El aplanado consiste en nivelar mediante espátulas y en ocasiones cemento u otros materiales adherentes la superficie de concreto, para hacerla más homogénea y uniforme.
Los colores del concreto pueden variar. En esta foto vemos cómo el arco de la puerta exhibe un color considerablemente más cremoso y cálido, que el gris claro del concreto del piso. Jugar con diferentes colores y técnicas hace que los espacios ganen mucho en riqueza visual y es por eso que lo recomendamos.
El concreto es un material muy utilizado para espacios con una impronta rústica. Como la mayor parte de sus materiales provienen de la naturaleza, es una excelente combinación con madera o piedra.
Este acabado se realiza in situ, utilizando tiras de hule que se pegarán en el concreto mientras se seca y que se pueden arrancar con facilidad una vez que logremos la superficie a rayas que deseamos.
En casas modernas, por otro lado, el concreto con un acabado más uniforme es siempre una opción clásica de este estilo. Lo encontramos en pisos, escaleras y paredes, combinado con acero vidrio y, muchas veces, madera.
En estas paredes podemos apreciar cómo se fraguó el concreto de las paredes contenido en estructuras hechas con tablones de madera. De esta forma queda impresa la marca de los tablones y una huella muy tenue de su veta.
Otras opciones que podemos probar son los tonos de gris que van desde un pizarra bastante claro, a un gris plomo muy profundo. En esta casa de estilo midcentury, se optó por un concreto en tono oscuro que contrasta con los pisos de madera más claros.
Acá en esta imagen, podemos ver un ejemplo de concreto más claro, que funciona mejor si lo que buscamos es más luminosidad en determinados espacios.
Al vertir el concreto, en ocasiones se hace en receptáculos cuadrados o rectangulares de cierto tamaño. Como resultado, podremos ver las juntas en el piso. Esto es común al usar mezcla menos flexibles, que pueden romperse o resquebrajarse si extendemos la mezcla en espacios demasiado amplios.
Otra opción muy interesante para utilizar el la mezcla de concreto es elaborando muebles empotrados en pisos y paredes. La única desventaja de estos muebles es que no podemos moverlos de lugar, pero su belleza y el hecho de ser muy prácticos y económicos lo compensa.
La verdad es que el concreto es un material mucho más versátil de lo que uno pensaría, ¿no creen?
No dejen de leer: 18 Espacios Acogedores Decorados con Madera Laminada, Maciza y Contranchapada