Diseñadores de cocinas en Puebla
Primero es importante definir que un diseñador de cocinas no se dedica únicamente a diseñar y fabricar el mobiliario de la cocina, es decir, no nos referimos a la cocina como mueble, sino a la cocina como espacio.
El diseño interior de espacios en específico requiere de una preparación especial en el manejo, funcionamiento, equipamiento, dimensiones e infraestructura de dicho lugar. Esta preparación se puede dar por experiencia y estudios especializados sobre el tipo de infraestructuras y dimensiones antropométricas que se requieren, como recorridos, alturas, giros, materiales, instalaciones de agua, gas, drenaje, electricidad y otros.
Pero no es lo único que un diseñador o diseñadora de cocinas debe saber. Es importante conocer el tipo, estilo y sistemas de cocinas tradicionales de la región donde se desarrolla, así como las últimas tendencias de diseño, estilo y acabados.
El profesional que se dedique al diseño de cocinas debe manejar varios oficios o al menos conocer las bases de ellos para considerarlas en el diseño del espacio, entre estos:
La gastronomía de Puebla es reconocida internacionalmente, esto obliga a contar con cocinas funcionales, prácticas, amplias, luminosas y con materiales resistentes.
Por otro lado, la arquitectura tradicional de Puebla es colonial, con detalles rústicos y campiranos, aunque la modernidad exige adecuaciones vanguardistas con una mezcla de rusticidad ecléctica y contemporánea. Esto se ha llevado al interiorismo, contemplando al diseño de cocinas.
Las viejas casonas cuentan con amplias cocinas con alacenas, hornos de piedra, mesones de gruesa madera, mesetas revestidas con talavera, grandes estructuras de hierro forjado de donde cuelgan las ollas, extractores de piedra y ladrillo, pisos de madera y mucho color. Sus diseños contemplan ubicaciones muy específicas en la distribución de hogar: alejadas de los servicios sanitarios, con salidas hacia los huertos o jardines, lejos de las recámaras, entre otras cosas.
El interiorismo contemporáneo incluye detalles tradicionales con un toque más funcional para la vida moderna, como cocinas más pequeñas con alacenas compactas, mesetas con gabinetes inferiores, alacenas superiores, extractores modernos de acero inoxidable o bien chimeneas de piedra o ladrillo con estilo industrial, aunque la talavera y la luz natural siguen siendo prioritarias. Todos estos aspectos sólo alguien familiarizado con la región puede dominarlos.
Claro que los hay, el diseño de las cocinas en Puebla es un mercado muy amplio. Puedes encontrar despachos de arquitectura, de interiorismo, de arquitectura de interiores y hasta de decoración de interiores enfocados en el diseño de cocinas, desde la fabricación del mobiliario hasta el diseño del espacio.
Pero lo más recomendable es acercarte a un taller de diseño de cocinas, es decir, una firma o despacho especializado en el diseño de la cocina como espacio habitable, no un fabricante de muebles, no un plomero o electricista, un profesional del diseño espacial en cocinas. Y en homify hemos conformado un directorio de profesionales el diseño de cocinas en Puebla para atender a tus necesidades.
Sigue estos pasos:
Tipo de proyecto de cocina:
Primero hay que definir si se trata de un proyecto de habilitación o rehabilitación de una cocina dentro de una edificación, es decir que el espacio ya exista y se encuentre construido, si se trata de una cocina familiar en una vivienda residencial, si es una cocina industrial, un comedor comunitario, escuela pública o privada, si se trata de la cocina de un restaurante, una cafetería de oficina, etcétera. Este punto es indispensable, es lo primero que debe definirse porque de aquí parten las normas, reglas y lineamientos antropométricos y arquitectónicos del diseño.
Medidas del lugar donde estará la cocina:
Una vez definido el proyecto se procede a conocer el lugar, tomar medidas, hacer un levantamiento físico de lo que existe, lo que se puede utilizar, lo que se puede modificar, las entradas de luz, la ventilación, la infraestructura eléctrica, sanitaria, potable, de gas, las condiciones de los acabados, revestimientos, altura de cubiertas, etcétera.
Conocer las necesidades de la familia:
Un aspecto a considerar es que, independientemente de los lineamientos que por ley y antropometría existen para el diseño de una cocina, el diseñador debe conocer los hábitos de quienes vayan a utilizar el espacio, o bien las actividades que se llevarán a cabo, para definir una organización funcional y acorde a los requerimientos. No pueden organizarse de la misma manera una cocina para un departamento pequeño destinado a estudiantes universitarios que la cocina de un hogar para personas de la tercera edad o la de un restaurante de mariscos. El diseñador o diseñadora debe conocer de primera mano las necesidades de quienes vayan a utilizar la cocina, para lo que deberán realizar entrevistas y visitas al lugar o lugares relacionados.
Propuestas de distribución y organización de la cocina:
A partir de este levantamiento transcrito en un plano bidimensional y con el conocimiento de los lineamientos adecuados según el tipo de cocina a diseñar, más la información recabada en las entrevistas, se comienzan a trazar propuestas de distribución, recorridos y organización. Estas propuestas incluyen el acomodo de muebles, pero más que nada proponen la organización del lugar, dónde se ubican los recorridos, las áreas de mayor uso, el triángulo que se debe formar entre el refrigerador, el fregadero y la estufa, la ubicación de la isla si puede estar, las alacenas, los electrodomésticos, aprovechamiento de la luz, optimización de la ventilación...
Diseño de mobiliario y accesorios:
Conforme los propietarios dan su visto bueno o hacen correcciones, el diseñador va progresando en su propuesta. Una vez aprobada una propuesta de distribución se comienza el diseño del mobiliario: revestimientos, materiales, tipo de muebles, estilo, manejo de la iluminación.
Bocetos, planos de cocina y renders:
Finalmente el diseño toma forma y se presenta a los propietarios de diversas maneras: con bocetos, con realidades virtuales, renders, en maqueta, etcétera. Estos aprueban o hacen nuevas observaciones, hasta que finalmente queda un proyecto listo para llevarse a cabo, lo cual puede realizar el mismo diseñador de cocinas o bien supervisar a quienes los propietarios decidan contratar para la construcción y fabricación del espacio.
Muchos despachos de diseño de cocinas cuentan con sus propios diseñadores, constructores y fabricantes para la realización de las cocinas al 100%, pero hay muchos otros diseñadores cuyo trabajo consiste en la preparación y entrega del diseño, siendo el propietario quien se encarga de coordinar o encontrar otro despacho de construcción o fabricación para la realización de la cocina. Estos diseñadores, en su mayoría independientes, pueden ofrecer sus servicios para coordinar, supervisar o mantener contacto directo con quienes vayan a realizar el trabajo, para asegurar la fidelidad del proyecto. Es importante definir este tema desde la primera entrevista con los profesionales.
Hablamos de dos cosas:
En el segundo caso es importante contar con un presupuesto de la fabricación de la cocina, y es recomendable tener varias opciones para decidir por la que más se acomode a tu presupuesto. El diseño y fabricación de cocinas se cobra por metro lineal, y un costo aproximado es de 8000 pesos ya con acabados, instalación, herrajes, es decir instalada y funcionando. Aunque este costo puede variar si se construye con acero, mármol y granito, o con acabados de corian, madera de pino y concreto.